MASCULINIDAD, ROLES DE GÉNERO Y CUIDADOS
Christian trabaja la masculinidad desde una perspectiva saludable y corresponsable, alejándose de los estereotipos tradicionales que imponen la fuerza, la autosuficiencia y el silencio emocional como norma. Su experiencia en salud mental y trabajo con adolescentes le ha permitido ver cómo muchos jóvenes enfrentan una presión invisible para cumplir con un modelo de masculinidad rígido, donde pedir ayuda es visto como una debilidad. A través de su trabajo, promueve una masculinidad que permita sentir, expresar y cuidar sin vergüenza ni miedo al juicio, ayudando a los hombres a construir una identidad más libre y auténtica.
Uno de sus enfoques clave ha sido la participación y creación de círculos de hombres, espacios donde los participantes pueden compartir sus emociones, preocupaciones y experiencias sin el peso de la competencia o la expectativa de “aguantarse”. Estos espacios permiten cuestionar mitos sobre la masculinidad y fomentar el autoconocimiento, el respeto y la gestión emocional. Christian ha trabajado en talleres y dinámicas grupales donde los hombres pueden explorar su vulnerabilidad de forma segura, entendiendo que la fortaleza real no es la ausencia de emociones, sino la capacidad de gestionarlas y comunicarlas.
Su experiencia en retiros y encuentros de trabajo emocional con hombres le ha dado una visión más profunda sobre cómo el contexto social y familiar influye en la construcción de la identidad masculina. Ha participado en espacios donde se aborda la relación entre la masculinidad y el miedo al fracaso, la dificultad para establecer vínculos afectivos sanos y el impacto de la represión emocional en la salud mental.

Estos aprendizajes han reforzado su compromiso con la educación afectivo-sexual, la prevención de la violencia de género y la promoción de modelos de paternidad y cuidado más equitativos.
Christian también trabaja en la corresponsabilidad y los cuidados, ayudando a desmontar la idea de que las emociones y el cuidado de otros son tareas exclusivamente femeninas. En su labor con adolescentes y familias, fomenta la importancia de la empatía, la expresión emocional y la construcción de relaciones basadas en el respeto mutuo. Su visión es clara: necesitamos un nuevo modelo de masculinidad donde el cuidado, el respeto y la autenticidad sean valores fundamentales, permitiendo a los hombres ser parte activa del cambio hacia una sociedad más justa y equilibrada.
SALUD MENTAL Y TRABAJO
Christian trabaja como formador en empresas, enfocándose en la gestión del estrés, la ansiedad y la salud mental en el ámbito laboral, ofreciendo herramientas prácticas para mejorar el bienestar emocional de los empleados y fomentar entornos de trabajo más saludables. A través de sesiones dinámicas y participativas, enseña a los equipos a identificar fuentes de estrés, aplicar técnicas de regulación emocional y prevenir el agotamiento profesional, promoviendo una cultura organizacional donde la salud mental sea una prioridad.
Uno de sus pilares fundamentales es la gestión eficiente del tiempo y la productividad sin sacrificar el bienestar. En un mundo donde la inmediatez y la sobrecarga laboral afectan la calidad de vida, Christian trabaja con empresas para ayudar a sus equipos a organizarse mejor, establecer límites saludables y desarrollar estrategias de descanso activo. Su enfoque se basa en la idea de que ser más productivo no significa hacer más, sino hacer mejor, con mayor conciencia y equilibrio.
Además, fomenta la responsabilidad comunitaria dentro del entorno laboral, promoviendo valores como la empatía, la comunicación efectiva y el trabajo en equipo desde un enfoque humano. Mediante formaciones y talleres, ayuda a las empresas a construir espacios donde el apoyo mutuo y la inteligencia emocional sean clave para el desarrollo tanto profesional como personal de cada trabajador.

Un equipo emocionalmente sano es un equipo más comprometido, motivado y resiliente. Fuera del ámbito corporativo, también refuerza la importancia de trasladar estas prácticas a la vida cotidiana, ayudando a las personas a cuidar su salud mental no solo en el trabajo, sino en todas las áreas de su vida. Con un enfoque accesible y cercano, sus formaciones combinan conocimientos psicológicos con estrategias prácticas, creando un impacto real tanto en la dinámica de las empresas como en la calidad de vida de quienes las conforman.